Le fué muy mal de mano en mano, de boca en boca, de cama en cama; como una muñeca que se desgasta se queda vieja y la pela arrastra. Fue mujer serena hasta en el instante de entregarse presta a sus amantes. Es tiempo de llanto, es tiempo de duda, de nostalgia y de su locura. Tienes el consuelo de saberte llena de cariño lindo y de amor sincero, porque nadie supo robar de sus besos eso que te sobra y que nadie añora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario